Este mes de septiembre tiene varios cintillos distintivos. Y tal como reza el estribillo de una canción de salsa que hicieran famosa Ruben Blades y Willie Colon: Todo es según el color… del cristal con que se mira.
Para quienes hacen seguimiento del multilateralismo es un mes onusiano porque se activan distintos órganos especializados y se inicia la Asamblea General de la ONU. Es el mes que celebra el Día Internacional de la Paz, la Semana Global del Cambio Climático y pare de contar. Cada uno de estos y otros que se nos escapa mencionar podrían formar parte de un largo calendario de eventos.
Ahora bien, aterrizando en algo más cercano y sensible, la Situación/Caso de Venezuela es la denominación que se registra en el orden del día de algunos encuentros internacionales que nos interesa destacar en estas breves líneas, ya que sirven para ilustrar el estribillo de la canción ya señalada.
Por una parte, la instalación de las Sesión ordinaria del Consejo de Derechos Humanos (en Ginebra,) y por la otra, una Sesión ordinaria y una Sesión Arria del Consejo de Seguridad (en Nueva York). Estas reuniones del día 10Sept debemos verlas como antesala de lo que podrá tratarse en otras reuniones dentro de la complejidad institucional del Período de Sesiones Ordinaria de la Asamblea General de las Naciones Unidas que inicia el próximo martes 18Sept.
Por otra parte, debemos sumarles el preludio de un par de encuentros regionales: la Reunión Técnica Regional sobre Movilidad Humana de Venezolanos en las Américas (Quito, 3 y 4 Sept) con la consecuente Declaración de Quito con 18 puntos; y la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA sobre Crisis Migratoria originada por la situación en la República Bolivariana de Venezuela (Washignton, 5 Sept).
Cada una de estas reuniones ha seleccionado un cristal para atender el Caso/Situación de Venezuela. Es pertinente señalar que Caso/situación es la denominación genérica que asumen los organismos internacionales para tratar los asuntos relacionados con un país: Situación Siria, Situación Haití, Situación Myanmar. Esto es verificable en la ONU pero también en la OEA: Situación Nicaragua, Situación Venezuela. En los medios de comunicación y otros espacios el nombre de Venezuela lleva la carga de los problemas: Crisis Humanitaria, Crisis Institucional, Crisis Migratoria, entre otros.
La cristalería opaca del estribillo a la canción, casi como un alter-ego vengativo, es el de las autoridades venezolanas que siguen desconociendo ante la Comunidad Internacional la existencia de una crisis política, migratoria y mucho menos la humanitaria.
Vale señalar que esta variedad de cristales en reuniones internacionales, nos permite enfocar los anteojos en distintos puntos de la realidad; la realidad de una compleja crisis que sufre la sociedad venezolana, producto de un errado modelo político, cuyas consecuencias ha desbordado las fronteras nacionales e impactando seriamente la vecindad regional. Podemos tomar los anteojos de reclamo y sentir pena porque los avisos de alarmas no hayan sido atendidos en su oportunidad, sobre la salud, la violencia-represión y sobre el tema migratorio, entre otros. No obstante es relevante que en este mes de septiembre, la comunidad regional y mundial estén mostrando su preocupación efectiva dando entrada a evidencias y es meritorio que se estén considerando mecanismos de acción. ¿Será que pueden combinarse los cristales en un lente multifocal de Derechos Humanos y de intereses geopolíticos? ¡Seguimos trabajando!
@mirnayonis